Los elementos son la base de nuestro mundo. La energía más pura, incontrolable. El material del que está construido nuestra casa.
Como brujas tenemos que conocer los elementos, su energía, sus vibraciones. Es también una forma de conocernos a nosotras mismas. Los elementos se encuentran detrás de la sabiduría ancestral, llana, accesible.
El conocimiento de los elementos en las diferentes culturas no se empleaba únicamente para entender y preveer la meteorología y establecer así las cosechas. Los elementos hablan de más, hablan de nosotros. Y de esta forma en diferentes leyendas los elementos representan señales de los Dioses que nos indican el camino o nos envían una señal.
Tales de Mileto propuso como el principio o arché de todas las cosas el agua, posteriormente Anaxímenes propuso el aire, Heráclito el fuego y Jenófanes la tierra.
Empédocles los unificó en la teoría de las cuatro raíces (a las que Aristóteles más tarde rebautizaría como elementos).
LOS ELEMENTOS EN EL TAROT
LOS ELEMENTOS EN LA MAGIA
MARI DIOSA DE LOS ELEMENTOS EN LA MITOLOGÍA VASCA
Mari merece un apartado exclusivo dedicado a ella que en breve escribiré.
En la mitología vasca hay una Diosa llamada Mari, Amari o Maddi. O simplemente «La Dama». Representada en una mujer con patas de cabra, y que surca el cielo en su carro de fuego cada 7 años para cambiar de morada. Vive en cuevas, las cuevas representan la protección, el interior de la tierra y por analogía nuestro propio interior.
Hay algo que diferencia a esta Diosa de otros Dioses, no es una Diosa que envíe castigos (hago referencia a la versión de Maria más antigua, no a las nuevas aportaciones que han ido surgiendo con influencias evidentes de otras culturas). Mari es la explicación del comportamiento de los elementos, Mari nos traslada el conocimiento y las razones de la forma de proceder de los mismos.
Tengo que recalcar también, que para mi existe una notable diferencia entre Mari y Ama-Lur, que han sido consideradas y confundidas en muchas ocasiones como la misma Diosa.