Alguien me dijo una vez que el agua era el elemento más importante. Entonces todavía yo no era consciente de la fuerza e importancia de los elementos.
El Agua simboliza el origen y la creación, pero además representa la purificación y la regeneración. Salir de ella es la manifestación; sumergirse en ella es la disolución de la forma. Es símbolo del movimiento y transformación constante, de la limpieza…y también de la conexión con lo sagrado ya que el agua es fuente de vida.
El Elemento agua es el único que podemos encontrar en los 3 estados de la materia: sólido, líquido y gaseoso.
Nada permanece inalterable y estático en el mundo, y es el agua en el que se crea y sostiene esa existencia.
El Agua aparece como fundamento elemental del origen en los diferentes mitos de la Creación, la cosmogonía. Somos gestados en agua, en la oscuridad del útero, y damos a luz tras romper aguas. Pero no solo es elemento fundamental de nuestro origen y nacimiento, el agua se convierte en muchas culturas en la forma de entender el nacimiento y la muerte.
En el hinduismo, por ejemplo, se considera que el río Ganges conecta nuestro mundo con Moksa, el reino del Nirvana. Los antiguos griegos creían que el último paso al morir era cruzar el río Estigia para penetrar en el reino de Hades, que representaba la muerte. Y si el agua es importante en el momento de la muerte humana, también lo es en el Universo, y así lo constatan las investigaciones realizadas sobre la importancia del agua en la muerte de las estrellas.
El vínculo con la materia divina primigenia con el inframundo, lugar donde habitan los muertos y los monstruos es muy común: los egipcios y babilonios relacionaban a Nun y a Tiamat con la parte inferior del cosmos, zona oscura y fría, residuos de lo primero que existió. Homero vincula también al infierno con Océano quien sirve de tránsito hacia él y parece ser que incluso es una extensión del mismo.
Como elemento regenerador podemos encontrarlo también en los diferentes mitos que encontramos sobre el «Diluvio» en las diferentes épocas y civilizaciones.
La mitología griega describe tres inundaciones, la inundación de Ogigo, la inundación de Deucalion y la inundación de Dardano. Dos de las edades griegas del hombre terminaron en un diluvio: el diluvio ogigio terminó la edad de Plata y el diluvio Deucalión terminó la temprana edad de Bronce.
El elemento agua está presente en todas las fases del Universo y de la humanidad, desde la creación hasta su final.
En la filosofía china, el agua es uno de los cinco elementos. Se la asocia al planeta Mercurio, al norte, al invierno, al color negro (porque representa a las inundaciones), y se considera que gobierna los riñones. En el taoísmo el agua representa inteligencia y sabiduría, si bien la abundancia extrema de este elemento puede causar dificultad de elección y apego a las cosas. En el ciclo de dominación, el agua domina al fuego y es dominada por la tierra.
En los pancha maja-bhuta (cinco grandes elementos) del hinduismo y budismo temprano, el agua es ap o yala. También es uno de los «cinco movimientos» o «fases» del Wu Xing, hidratando la «madera» según el «ciclo de generación» (cheng) y apagando el fuego según el «ciclo de dominación» (ko)
EL AGUA Y LA CREACIÓN
Un océano cósmico o río celestial es un motivo mitológico que se encuentra en la mitología de muchas culturas y civilizaciones, que representa el mundo o el cosmos envuelto por las aguas primordiales.
En los mitos de la creación, las aguas primordiales a menudo son representadas inicialmente llenando todo el universo, siendo la primera fuente del cosmos de los dioses con el acto de creación correspondiente al establecimiento de un espacio habitable separado de las aguas envolventes.
En los mitos originarios de Mesopotamia y Egipto el rasgo distintivo es que en el origen del mundo existió una masa indiferenciada acuática.
Los Vedas también poseen esta misma creencia.“Principio de lo indiferencial y de lo virtual, fundamento de toda manifestación cósmica, receptáculo de todos los gérmenes, las aguas simbolizan la sustancia primordial de la que nacen todas las formas y a la que vuelven, por regresión o por cataclismo” (Eliade 2007, p. 178).
En Japón está la diosa Izanami y su consorte Izanagi que formaron la tierra a partir de las aguas primordiales y luego parieron a sus hijos, las constelaciones y todo lo demás.
SUMERIA
La sumeria fue la primera civilización mesopotámica (aprox 3000 a. C.)
Nammu es la diosa sumeria que identifica al «abismo de las aguas» en el océano primigenio. Nammu fue la primera deidad y origen del todo. Una Diosa o energía GENERADORA. Es muy posible, que al igual que en la cultura Egipcia, fuera en realidad más un «concepto» que una Diosa en sí misma. Diosa del nacimiento, su lugar de culto se centró en la ciudad de «Ur». Curiosamente, en euskera, agua=Ur. Menciono este dato, porque aunque pueda ser casualidad, hay muchas coincidencias entre nombres de la civilización Mesopotámica y el euskera. Como por ejemplo la Diosa Ishtar Acadia, representada por una estrella de ocho puntas y que formaba la triada de dioses con vínculo estelar junto a su padre (representado con una luna creciente), y su hermano (representado con el sol). En euskera «estrella» es «izar».
Nammu era la diosa que dio a luz al Cielo y a la Tierra, en los tiempos de los sumerios.
- Para los mesopotamios, Nammu era una divinidad aislada, única e inmensa que por sí misma, sin ayuda de un contrario u opuesto y por lo tanto «completa», había engendrado a la primera pareja, dando lugar a una serie de dioses que conformarán el cosmos. Esta primera divinidad se consideraba materia caótica (sin forma), acuosa y marina, un gran organismo vivo y generador, una diosa que generó el universo.
- Más tarde, todos los Dioses surgidos desde ella, fue contado en el famoso Poema de la Creación, Enûma Eliš, en que Nammu se mostró ya como dos enormes masas de agua divina; Tiamat que representaba el “Agua salada” primordial y bisexuada, y que es parecida a Nammu. Tiamat posee una mayor importancia que Apsû, la segunda gran masa líquida que representaba el mar de “Agua dulce”, y que se describe a continuación:
MITOLOGÍA BABILÓNICA
Si hacemos referencia al agua y a la creación, es indispensable hacer referencia a «Tiamat», que está representada en una de las cartas de los Arcanos de Ursula Dulcinea
El Enûma Eliš comienza:
- «Cuando en lo alto el cielo no había sido nombrado, no había sido llamada con un nombre abajo la tierra firme, nada más había que el Apsu primordial, su progenitor, (y) Mummu-Tiamat, la que parió a todos ellos…»
- 1. enûma eliš la nabuú šámamu Cuando en las alturas del cielo nada (fue, había sido) llamado (invocado)
- 2. šapliš ammatu šuma la zakrat Abajo en la tierra nada llamado por su nombre.
- 3. ABZUma reštuú zarušuun El primordial progenitor de ellos.
- 4. muummu ti’amat muallidaat gimrišúun mummu(origen de ?) Ti’amat, origen de todo (de todos ellos).
- 5. AMEŠšúnu išteniš iiquúma mezclaron sus aguas.
- 6. gipara la kiiuru uaa la še’uú las planicies no estaban unidas, los cañaverales no se encontraban
- 7. enuma DINGIR.DINGIR la wapum šupuú manana. cuando ninguno de los dioses había sido visible
- 8. šuma la zukkuru šimatú la šiimu ellos no eran llamados por su nombre, los destinos no habían sido decretados.
- 9. ibanuúma DINGIR.DINGIR qrebšúun los dioses fueron creados entre ellos.
El universo apareció por primera vez cuando Tiamat y Apsu, elementos acuosos, concibieron a los primeros dioses Anshar y Kishar, de cuya descendencia provienen el resto de los dioses sumerios.
Tiamat es la diosa primordial del «mar salado» perteneciente a la mitología babilónica, también asociada a un monstruo primordial del caos mencionada en el poema épico Enûma Elish. Ti significa vida y ama, madre.
En la religión de la antigua Babilonia, Tiamat es una diosa primordial del mar salado, que se une con Abzû, el dios del agua dulce, para producir dioses más jóvenes. Ella es el símbolo del caos de la creación primordial. Se la conoce como mujer y se la describe como la reluciente.
Tal y como describo en «el origen, mitología sumeria, enûma eliš» la traducción de «Mummu» lleva a pensar a algunos investigadores que su significado es directamente el de «generadora en sí misma», incluso de Tiamat y Apzu.
MITOLOGÍA ASIRIA
La historia de Atrahasis, también conocido como Utnapishtim (para los babilonios) o Ziusudra (para los sumerios), que es el protagonista del poema que lleva su nombre, empieza mucho antes de que este entre en escena, y antes de que la humanidad fuera pensada y creada, dice así:
-
- Los dioses tuvieron que drenar los ríos y limpiar los canales,
- y las fronteras de la vida de la tierra,
- los dioses drenaron el lecho del Tigris
- y luego ellos drenaron el Éufrates.
EN LA MITOLOGÍA EGIPCIA
En la mitología egipcia, el agua primordial es divina, no tiene un rol secundario, es más, tiene nombre propio, Nun.
Según el mito de la creación de los egipcios, el mundo, se engendró de una masa acuática primigenia indiferenciada e informe. Existieron varias versiones acerca del origen del mundo pero todas ellas coincidieron en que en principio sólo existió el caos; el cosmos no es la obra de un dios que haya existido eternamente.
Nun era entendido como un «concepto»; es el principio común en todas las cosmogonías, la primera sustancia abstracta, el elemento caótico que contiene el potencial de la vida, simbolizado como caóticas aguas primordiales que ocupaban todo el universo.
GÉNESIS
en la Biblia. Leemos en Gen. 1, 1-2:4
En el principio creó Dios el cielo y la tierra
Y la tierra era sin forma y vacía,
y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo
y el espíritu de Dios se movía sobre las aguas.
GRECIA
En la mitología
Según Hesíodo en un principio sólo existía el CAOS. Después emergió GEA (la tierra) surgida de TÁRTARO, tenebroso de las profundidades y EROS (El amor) elemento primordial que no hay que confundir con Eros o Cupido, hijo de Afrodita. Del Caos por la acción de Eros surgieron EREBOS (las tinieblas), cuyos dominios se extendían por debajo de Gea, y NYX (la oscuridad o la noche). Erebos y Nyx originaron a ETER y HEMERA (el día) que personificaron respectivamente la luz celeste y terrestre.
Con la luz, Gea cobró personalidad y comenzó a engendrar por si sola. Es así como surgió URANO (El Cielo Estrellado). También produjo las altas montañas.
Urano contempló a su madre desde las elevadas cumbres y derramó una lluvia fértil sobre ella, naciendo así las hierbas, las flores y los árboles con los animales que formaron como un cortejo para cada planta. La lluvia sobrante hizo que corrieran los ríos y al llenar de agua los bajos se originaron los lagos y los mares, todos ellos deificados con el nombre de Titanes: OCÉANO – CEO – CRÍO – HIPERIÓN – CRONOS; y las Titánidas: TEMIS – REA – TETIS – TEA – MNEMOSINE – FEBE; de ellos descendieron los demás dioses y hombres.
En la filosofía
Tales explicó que el principio originario de la naturaleza y de la materia era una única sustancia última (arché): el agua
La explicación universal y racional que sostuvo Tales fue que el agua es el origen de todas las cosas que existen, el elemento primero. Fue el primer hombre occidental (del que se sabe) que trató de conocer la verdad del mundo mediante explicaciones racionales y no por medio de los mitos
EL AGUA Y LA MUERTE, LA REGENERACIÓN
MITOLOGÍA BABILÓNICA
La versión más antigua de una alegoría o historia sobre un diluvio universal se encuentra escrita en la historia de Utnapishtim (dentro del Poema de Gilgamesh) escrito aproximadamente en el 2100 a. C.
Utnapishtim es un personaje presente en el mito del diluvio mesopotámico; siendo además el sabio al que recurre el héroe mitológico Gilgamesh, para poder encontrar la inmortalidad en El Poema de Gilgamesh, del que puedes encontrar más contenido en Enkidu y Gilgamesh. Esta historia es paralela a la de Noé, a pesar de haber sido escrita mucho antes que esta última.
Cuenta la leyenda que hubo una época en que los dioses vivían junto a los humanos en la ciudad de Shuruppak. Estos decidieron un día acabar con la raza humana con una inmensa inundación. Pero Ea (Enki – Enkil), tuvo piedad, y a través de las paredes de la choza de Utnapishtim, le dio la orden de destruir su casa, construir un barco y subir a este a todas las especies vivientes conocidas. La tierra fue asolada por una tempestad que duró seis días y seis noches hasta que el séptimo todo se calmó. Utnapishtim se asomó desde su barco y vio como toda la humanidad se había convertido en arcilla y como en el paisaje, solo emergía el pico del monte Nisir, lugar donde estaba posada el arca.
Después de una semana, Utnapishtim soltó una paloma que volvió. Después soltó una golondrina que también volvería. Por último soltó un cuervo que no volvió, indicando a Utnapishtim de que las aguas había bajado, ya que el pájaro había encontrado un lugar donde posarse. Sólo entonces salió del arca, hizo un libación y quemó como ofrendas cañas y maderas de cedro y mirto. Al fracasar el plan del diluvio ideado por Enlil, este se enfureció y se quejó a Ea (Enki – Enkil). Pero Ea (Enki – Enkil) defendió su causa y la de los hombres de tal forma que Enlil se emocionó y bendijo a Utnapishtim y su mujer, los cuales -según palabras de Enlil- desde ese momento serían semejantes a los dioses.
MITOLOGÍA SUMERIA
Ziusudra es un héroe de la mitología sumeria, protagonista del mito sobre el diluvio universal, encontrado en su versión más antigua en una tablilla hallada en Nippur.
MITOLOGÍA ASIRIA
Esta versión del diluvio se detalla al igual que la creación en La historia de Atrahasis. Al principio, la solución de los dioses con sus dificultades va bien: los hombres hacen nuevos picos y azadas, y cavan canales más grandes para alimentarse, tanto ellos como a los dioses. Pero después de 1200 años, la población se ha reproducido tanto que Enlil tiene problemas para dormir:
-
- El país era tan ruidoso como un toro que bramaba.
- Los dioses crecían agitados y sin paz, con los disturbios ensordecedores,
- Enlil también tuvo que escuchar el ruido.
- Él se dirigió a los dioses superiores,
- El ruido de la humanidad se ha hecho demasiado grande,
- pierdo el sueño con los disturbios.
- Dé la orden de que la surrupu (enfermedad) estalle.
La plaga estalla, pero Atrahasis, el sabio, apela a su dios Enki para que le ayude. Este le aconseja que haga que la gente deje de rezar a sus dioses personales y comience a rezar y a ofrecer sacrificios al dios de la plaga, Namtar. Namtar se siente tan avergonzado por este espectáculo de atención que limpia «lejos sus manos» y declara el final de la plaga.
Después de otros 1200 años, la humanidad nuevamente se ha multiplicado, al punto de que se violan las ordenanzas de Enlil acerca del ruido. Esta vez Enlil decide una sequía para reducir el número de habitantes y consigue que Adad, el dios de las lluvias y los truenos, contenga las lluvias. Otra vez Atrahasis apela a Enki, y otra vez él le aconseja concentrar la adoración en un dios responsable. Adad también se siente avergonzado y libera su lluvia.
Otros 1200 años pasan, y el ruido se hace enorme. Esta vez Enlil quiere asegurarse de que ningún dios pueda debilitar su resolución, entonces declara «un embargo general de los regalos de toda la naturaleza. Anu y Adad debían guardar el cielo, Enlil la tierra, y Enki las aguas, y ver que ningún medio de alimentación alcance a la raza humana». Además, Enlil decreta la infertilidad:«Que la matriz quede demasiado apretada para dejar (salir) al bebé fuera». Las cosas finalmente se ponen bastante mal:
-
- Cuando el segundo año llegó, los hombres ya habían agotado lo almacenado.
- Cuando el tercer año llegó, las miradas y la belleza de la gente
- Fueron cambiadas por el hambre.
- Cuando el cuarto año llegó, su estampa y porte habían declinado,
- Sus hombros de buen semblante, se sentó con los hombros caídos,
- La gente salió ante el público encorvada.
- Cuando el quinto año llegó, una hija miraría a su madre;
- Una madre no abriría la puerta a su hija….
- Cuando el sexto año llegó
- Ellos sirvieron a una hija para una comida,
- Servida de un hijo para el alimento.
Aunque aquí las tablillas están rotas y el texto está fragmentado, parece que Enki frustra el plan de “hambre completa” y libera grandes cantidades de pescado para alimentar a la gente hambrienta. Enlil se pone furioso con Enki, pero la rotura está al mismo nivel del resto de los dioses, y él además va contra un plan con el cual todos habían estado de acuerdo. Convencido de borrar a la humanidad de la faz de la tierra, Enlil decide dos cosas: Enki creará una inundación para borrarlos y lo forzará a jurar para no interferir con la destrucción. Enki se opone a la idea de la inundación («¿Por qué debería yo usar mi poder contra mi gente?… ¡Esa clase de trabajo es para Enlil!»), pero al parecer, finalmente tiene que prestar juramento.
Después de otra rotura, el texto continúa con Enki que se dirige a Atrahasis (¡todavía vivo, después de todos estos años!) para advertirle de la inundación inminente. En realidad Enki habla a las paredes de la choza de caña de Atrahasis para no actuar en contra de su juramento:
-
- ¡Pared, escúchame atentamente!
- ¡Choza de caña, asegúrate tú, de escuchar todas mis palabras!
- Desmonta la casa y construye un barco…
- ¡Que la azotea sea como el Apsu, que ni el sol pueda penetrar dentro!
- Haz cubiertas superiores e inferiores,
- al abordar deben ser muy fuertes,
- que el betún sea fuerte.
Atrahasis junta a los mayores de Shuruppak y pone una excusa para dejar la ciudad: dice que Enki y Enlil están enfadados el uno con el otro y que Enki le ha mandado que vaya al borde del agua. Cosa que hace, y allí construye su barco y lo llena con cada tipo de animal (el texto está fragmentado aquí) y su familia. Adad comienza a tronar, y enfermo con el destino inminente («su corazón se rompía y él vomitaba la bilis»), Atrahasis sella por encima la puerta del barco con el betún. La tormenta y la inundación resultan ser más de lo que los dioses planearon:
-
- Como un asno salvaje que grita los vientos aullaron,
- la oscuridad era total, no había ningún sol….
- Como para Nintu la “Gran Amante”,
- Sus labios se resecaron por la escarcha.
- Los grandes dioses, los Annuna,
- Estaban sedientos y hambrientos.
- La diosa miró y lloró…
La gran diosa madre se queja amargamente de los defectos de Enlil y de Anu, como funcionarios con poder de decisión, y llora por los humanos muertos que «obstruyen el río como libélulas.» También, «ella añoró la cerveza (en vano).» Ahora esto es la vuelta de los dioses a pasar hambre: «como la oveja, ellos sólo podrían llenar sus tráqueas del balar. / Sediento como ellos, estaban sus labios / Descargados sólo la escarcha de hambre «. Después de siete días y noches de lluvia, la inundación disminuye, Atrahasis desembarca y ofrece un sacrificio. Los dioses hambrientos huelen la fragancia y se juntan «como moscas (que) vuelan sobre el ofrecimiento». En otro pasaje mutilado del texto, la gran diosa se entusiasma y jura con un collar, con el que ella recordará la inundación. Enlil descubre el barco y se pone furioso, sabiendo que sólo Enki podría haber sido bastante inteligente para salir con este nuevo truco. Enki admite que él advirtió a Atrahasis, «ante el desafío» de Enlil: «Me aseguré de que la vida fuera conservada». El texto está fragmentado en este punto, pero al parecer Enki persuade a Enlil de adoptar un plan más humano (menos drástico) para tratar con el problema demográfico y de ruido. Enki y la diosa de la matriz Nintu deciden que de allí en adelante un tercio de las mujeres no dará a luz satisfactoriamente: un demonio Pasittu «arrebatará al bebé del regazo de su madre». Ellos también crean varias clases de mujeres al servicio de los templos a las que no permiten tener hijos.
GRECIA
Como hemos mencionado anteriormente, en la mitología griega encontramos 3 grandes inundaciones, de las cuales 2 dieron fin a las diferentes edades del hombre
El diluvio ogigiano se llama así porque ocurrió en la época de Ogigo, un rey mítico de Ática. El nombre Ogigo y Ogigiano es sinónimo de «primordial» y «primer amanecer» . Otros dicen que fue el fundador y Rey de Tebas. En muchas tradiciones se dice que el diluvio ogigio cubrió el mundo entero y fue tan devastador que Ática permaneció sin rey hasta el reinado de Cecrope.La expresión se acuñó como una de las cinco Edades del Hombre descritas por Hesíodo, y que comienzan con la creación del hombre a partir de las piedras arrojadas por Deucalión y Pirra tras un diluvio. Esta humanidad vivió durante cien años como niños, sin crecer; que repentinamente envejecieron y murieron. Zeus los destruyó por su impiedad (diluvio de Ogigia).
Platón en sus leyes, Libro III, argumenta que este diluvio había ocurrido diez mil años antes de su tiempo, en contraste con solo «uno o dos mil años que habían transcurrido» desde el descubrimiento de la música y otros inventos. También en Timeo (22) y en Crizia (111-112) describe el «Gran Diluvio universal» precedido por 9. 000 años de historia antes de la época de Solón, durante el X milenio antes de Cristo. Además, los textos informan que «muchas grandes inundaciones habían ocurrido durante los nueve mil años» desde que Atenas y la Atlántida fueron prominentes. Africano considera que «la inundación ogígica ocurrió en Ática, cuando Foroneo era rey de Argos, como relata Acusilao».También compara el diluvio ogígico con el bíblico y lo sitúa en el año 1.793 a.C
La mitología griega relata la historia de un gran diluvio producido por Zeus, quien había decidido poner fin a la existencia humana, por haber aceptado el fuego que Prometeo había robado del Monte Olimpo. Deucalión y su esposa Pirra fueron los únicos supervivientes. Prometeo le dijo a su hijo Deucalión que construyese una embarcación, en la cual dispusieron todo lo necesario, y así sobrevivieron. El mito menciona que el diluvio fue ocasionado por el viento Austro (del sur): «solo se dio salida al Austro, el cual se precipitó a la Tierra cargado de lluvia». Al terminar el diluvio, y una vez que se secó la tierra y las aguas retrocedieron al mar, el arca de Deucalión se posó sobre el monte Parnaso, en donde estaba el oráculo de Temis (Apolo aún no había nacido). Deucalión y Pirra entraron en el templo para que el oráculo les dijera qué debían hacer para volver a poblar la Tierra, y la diosa solo les dijo: «Vuélvanse hacia atrás y arrojen los huesos de su madre.» Deucalión y su mujer adivinaron que el oráculo se refería a las rocas. De esa forma, las piedras arrojadas por Deucalión se convirtieron en hombres, y las arrojadas por Pirra en mujeres.
Simbolismo iconográfico
En China y en Japón, el agua era representada por una tortuga negra, conocida como 玄武 (Xuán Wǔ). En la religión azteca, por una caña; en la religión hindú, por la sangre; para la cultura griega, por una copa; para los escitios, como un cuenco; para los celtas, un caldero.
El cristianismo, tomando algunos aspectos iconográficos de la cábala, identifica el elemento agua con el arcángel Gabriel y el evangelista San Juan (con su animal simbólico: el águila).
EL AGUA EN LA ADIVINACIÓN
FUENTE CASTALIA
En la antigua Grecia, muchos de los grandes santuarios fueron construidos cerca de ríos y manantiales, como el Santuario de Apolo en Delfos, donde el agua de la fuente de Castalia desempeñaba un importante papel en la formulación de vaticinios. Además, los manantiales y ríos eran considerados lugares sagrados, habitados por deidades del agua, como las ninfas y las musas, de quienes se creía que vivían en estos paisajes acuáticos naturales, donde se las veneraba en santuarios al aire libre.
La fuente Castalia en el santuario de Delfos, a mitad de camino entre Marmaria y el santuario se hallaba la fuente o manantial sagrado de «Castalia», donde los peregrinos se purificaban antes de entrar en el recinto sagrado. Otra fuente menor «Kassotis» ya dentro del témenos, era donde la Pitia o pitonisa realizaba abluciones antes de pronunciar sus augurios. También debían purificarse en la fuente los sacerdotes y las personas que quisieran realizar una consulta al oráculo.
Según la mitología griega, su nombre deriva de la ninfa Castalia, hija del río Aqueloo que era esposa del rey de Delfos y que tuvo un hijo llamado Castalio que se convirtió en rey cuando murió su padre o, según otra tradición, por una muchacha de Delfos llamada Castalia que se sumergió en la fuente cuando era perseguida por Apolo.
Otro mito describe que la fuente era custodiada por una dragona —la serpiente Pitón—, y fue muerta por Apolo;
La leyenda cuenta que en el monte Parnaso. Se decía que el agua que manaba borboteaba bajo la influencia de Apolo cuando este emitía un oráculo
La fuente de Castalia es citada como un lugar relacionado directamente con Apolo y su oráculo, y que servía para la purificación ritual tanto de las pitias, como de los otros sirvientes del oráculo, que se lavaban sus cabellos con sus aguas, como del propio templo de Apolo, sobre el que se vertían gotas de agua para humedecerlo.También se purificaban en la fuente los que venían a consultar el oráculo.
Castalia podía inspirar el genio de la poesía a aquellos que bebían sus aguas o escuchaban su suave sonido. Su agua sagrada también se usaba para purificar los templos délficos. Apolo consagró Castalia a las Musas, de hecho, en la representación de estas en el Tarot de Mantegna, podemos apreciar la fuente y el Rio.
El Santuario de Asklepios en Epidauro, es el centro sanitario organizado más antiguo, y atestigua la transición de la curación divina a la ciencia de la medicina. A partir del siglo XVI a. de C., la adoración se basaba en la capacidad catártica y curativa de la fuente sagrada del agua
EL AGUA EN LA TRADICIÓN ritual
EL AGUA EN LA NOCHE DE SAN JUAN
AGUA LUSTRAL
Llamaban así los gentiles al agua en que habían apagado un tizón ardiendo sacado de la hoguera de un sacrificio. Atribuían a esta agua grandes virtudes y se servían de ella muy a menudo en sus ceremonias, rociando al pueblo y otros objetos
La tenían por lo común en unos grandes vasos colocados a la puerta o en el vestíbulo de los templos; y los que entraban en ellos se lavaban ellos mismos, o bien se hacían lavar por los sacerdotes. Cuando había un muerto en una casa, se ponía a la puerta un gran vaso lleno de agua lustral, el que pasaba de la casa de un difunto a la del otro. Todos los que asistían a los funerales se rociaban al salir con ella, sirviéndose también de la misma para lavar el cadáver.
El uso del agua lustral fue conocido de los egipcios, de los hebreos, de los etruscos, de los griegos y de casi todos los pueblos de la antigüedad.
ARTÍCULOS SOBRE EL ELEMENTO AGUA
El agua es símbolo de pureza, regeneración y fertilidad, juega…Propiedades mágicas de El Agua en la noche de San Juan
FUENTES:
Nacimiento y muerte de las estrellas: fundacionaquae.org/nacimiento-y-muerte-de-las-estrellas/
mj2artesanos.es/blog/la-diosa-nammu-y-los-anunnaki/